INSTITUTO DE ESTÉTICA

Reflexiones y cuestionamientos a la representación del paisaje en Chile salen a la luz a través del arte y la investigación en nuevo libro

El viernes 2 de diciembre a las 18.00 hrs. en Campus Oriente, la artista y postdoctoranda del Instituto de Estética UC, María Rosario Montero, lanzará su libro “Una línea marca el horizonte: Fotografía contemporánea del paisaje en Chile” (editorial Metales Pesados), temática que ha abordado en diversas investigaciones orientadas a proponer nuevas formas de representar el paisaje en el territorio. La actividad se realizará de manera presencial en la Sala Fidel Sepúlveda de Estética UC.

Arte, fotografía e investigación se reúnen en el nuevo libro de María Rosario Montero, quien este año se incorporó como postdoctoranda a nuestro Instituto. Ya en sus aproximaciones académicas del doctorado (Estudios Culturales, Goldsmith College), el tópico de representación del paisaje en Chile aparecía como interés principal. Desde entonces orientó sus hallazgos a pensar cómo, ante el estado de las cosas, se podían proponer nuevas formas de representar el paisaje contemporáneo.

“Pude observar que existe un statu quo desde las instituciones, en cómo se manifiesta la identidad país. Se trata de imágenes fijadas por el extractivismo de la naturaleza”, señala en torno a sus años como doctoranda. Posteriormente, Montero obtuvo un Fondart para investigar de qué manera otras fotógrafas concebían el hacer fotografía como práctica, cuestión que incluía escribir y producir, es decir, a la luz de una práctica expandida que guardaban miradas alternativas del paisaje.

Luego, en años de cuarentena y como parte de su proyecto Fondart, la artista gestionó una serie de mesas de trabajo en que entrevistó a fotógrafos/as, curadores/as, gestores/as e investigadores/as de la fotografía para conversar sobre la vinculación entre fotografía, paisaje y poder. “Les invité a pensar de qué manera la representación se enlaza con estrategias para conservar el poder”, especifica.

Así, el libro “Una línea marca el horizonte: Fotografía contemporánea del paisaje en Chile”, reúne tanto su trabajo de años como doctoranda, así como el resultado del Fondart. La investigadora explica que esta publicación, al mismo tiempo, se traza por medio de   genealogías que apuntan al hecho de que la fotografía “es una consecuencia de muchas otras cosas que ocurren en la producción y percepción que trascienden lo semiótico, de manera que es posible comprender que aquello representado es, de alguna manera, insuficiente”.

En este sentido, Montero rastrea la labor de los naturalistas y su mirada colonial del paisaje que nace con la instauración de la nación. “Se trataba de naturalistas contratados para categorizar qué recursos existían para explotar: cerros, volcanes, plantas. Esta concepción se transfiere a una fotografía que es foránea, pues aquellos naturalistas construyeron su comprensión del territorio a partir de sus lugares de origen”, apunta y agrega que, desde esta perspectiva, pese a la diferencia de formatos y soportes técnicos, “la comparación contrastante a ese origen es innegable”.

La referencia a otros a nivel de producción de imágenes, continúa, muchas veces constituyen las representaciones. Al respecto, cuenta que las primeras cámaras que llegaron a Chile se utilizaron para fotografiar el norte con foco en la industria a la luz de una mirada que observa al hombre “como quien gobierna la naturaleza. Vemos el desierto árido imposible, reconfigurado por la mirada, retratado en la capacidad de dominio del hombre y eso es lo que se fotografía”, relata.

A inicios del siglo XX prácticamente sólo es posible encontrar fotografías de paisaje sin gente y cuando hay personas, añade Montero, “son  fotografiados como naturaleza, es decir, los trabajadores de la salitrera se incluyen en las panorámicas como parte del ecosistema. Son, de alguna forma, parte de la naturaleza y no se consideran iguales con el ojo del fotógrafo”. Junto con poner en tensión el poder de la cámara y del fotógrafo, la investigadora explora el comienzo de la maquinaria de imágenes para el turismo que surge tras la inauguración de ferrocarriles del Estado.

Con la posibilidad de recorrer el territorio, una práctica que comenzó a ser frecuente profundizó la artista, es la de fotografiar los highlights, cuestión que no prescinde de la mirada foránea sobre “parecerse a” en torno a la idea de que Chile “sería la Suiza de Latinoamérica”. En una época más reciente, por otro lado, hay hitos remarcados en el libro, tales como el momento en que representantes del país llevaron un glaciar a Sevilla en los años 90 “para constituir esa mirada de nación alineada justamente con el extractivismo en sintonía con esas imágenes que se construyen sin habitantes”.

En estos términos, Montero desmonta la fetichización u objetivización de la naturaleza presentada como materia dispuesta a ser consumida o la productivización de sus recursos que, “innegablemente son necesarios para supervivencia humana, pero no deberían ser la única manera de relacionarnos con la naturaleza”, manifiesta.

La selección abordada en la nueva publicación, tanto de artistas como investigadores junto a sus obras y reflexiones intercaladas con la mirada de la autora, contempla a más mujeres que hombres, puntualiza Montero, quien busca dar cuenta de obras vivas creadas por contemporáneos. “Son creadores/as que trabajan el tema del paisaje y la fotografía como centro de sus reflexiones. Algunos transitan en un ámbito más intermedial haciendo video o performance y lo que deriva de eso”, ejemplifica.

Algunos/as de los/as creadores/as presentes en el libro, por ejemplo, son Constanza Valderrama, quien se enfoca en la idea de imagen-nación y trabaja sobre la representación del paisaje cuestionando la frase del expresidente Sebastián Piñera sobre “Chile como el oasis de Latinoamérica”. “La artista contrapone imágenes de oasis y la Suiza perfecta que se cae a pedazos”, reflexiona la autora. Por otro lado, encontramos una ilustración del artista Sebastián Calfuqueo, quien suele trabajar desde la performance y materializarla en videos y fotos. Asimismo, el colectivo Agencia Borde –al cual pertenece Montero–, incluye la labor de la autora junto a Sebastián Melo y Paula Salas.

Metodología de trabajo

Para dar vida a este libro, la académica gestionó diez mesas de cuatro personas cada una, para reflexionar en torno a una pregunta sobre las maneras en que se representa el paisaje y el poder en Chile. “Todos llegaban con la idea sobre qué responder, luego se politizaba la reflexión y apuntábamos a una imagen más global de la función de la fotografía en la sociedad y cómo se insertaban prácticas asociadas”, señala. En una segunda reunión, los participantes de las mesas tenían que llevar imágenes que se vinculaban, una debía corresponder al statu quo y la otra a pensar una mirada alternativa del paisaje.

Así, surgieron seis capítulos donde se aborda un tema antecedido en su mayoría por una intervención artística que busca dar cuenta de diversas prácticas visuales. Montero, en tanto, plantea en el texto un lugar de enunciación que apunta “no a un estado de las cosas, sino reflexiones intercaladas con teoría y una mezcla de voces”, expresa.

Asimismo, la autora dio a conocer algunos de los/as pensadores/as a los que recurre el libro, tales como Silvia Rivera Cusicanqui y sus postulados sobre el sentir y pensar; las teóricas Ángeles Donoso sus reflexiones sobre fotografía expandida, Ariella Azoulay con la potencialidad de la fotografía como tecnología de resistencia y también Vilém Flusser, quien reflexiona sobre el aparato fotográfico como agente en la creación de imágenes.

Finalmente, en cuanto a las complejidades asociadas a expresar la idea de Chile como país, Montero apuntó a que existen “muchas formas de entender el paisaje a partir del territorio, de manera que traté de incluir trabajos de todas las regiones, aun cuando quizás esté más cargado al centro”, a lo que agrega que, si bien, son cuarenta voces, está consciente de la dificultad de ser representativa.

Actualmente, Montero se encuentra desarrollando su investigación de postdoctorado patrocinada por nuestra académica Valeria de los Ríos, reflexiones que podemos reconocer en el último capítulo del libro, el cual se adentra en cómo se representa  la naturaleza y las dicotomías presentes a la par de cómo artistas proponen miradas alternativas. Su investigación contempla tres ejes: bosque, agua y cordillera. Por estos días, Montero se encuentra concentrada en el ámbito del bosque a través de su proyecto Bosques de fuego (junto a Agencia de Borde) que apunta a las plantaciones de monocultivo. Todo con el foco de dar a conocer las estrategias visuales que han sido parte de las representaciones en que la separación de naturaleza y cultura se vuelven patentes.

*El viernes 2 de diciembre en la sala Fidel Sepúlveda del Instituto de Estética UC, Campus oriente (Av. J. Guzmán 3300, metro Chile España), se lanzará de manera presencial el libro “Una línea marca el horizonte: Fotografía contemporánea del paisaje en Chile”. Sólo debes llegar ese día a esa hora. Para quienes no puedan asistir de manera presencial, deberán inscribirse en este LINK para recibir coordenadas de Zoom.

Sobre los/as participantes del lanzamiento:

María Rosario Montero (Autora): Doctora en Estudios Culturales (Goldsmiths College), MFA (Universidad de Chile) y Master en Antropología Digital (UCL). Realizó su primera muestra individual en la Galería CCE (Chile) en 2004, participando en varias exposiciones en Chile, China, México, España, Reino Unido, Holanda y Venezuela, entre otras. Ha recibido en varias ocasiones becas de producción del gobierno de Chile (FONDART). Recientemente, recibió el segundo lugar del concurso Beca Arte CCU, como reconocimiento a su trayectoria y beca para realización de postdoctorado en el Instituto de Estética (UC). Su trabajo es parte de la selección de fotógrafos chilenos contemporáneos para 02 / CNCA (2010) y C Photo edition, “New Latin Look” curada por Martin Parr (2012). En la actualidad vive en Santiago de Chile siendo parte del colectivo de arte Agencia de Borde.

Soledad Abarca (panelista): Licenciada en Artes con mención en Conservación y Restauración PUC (1994). Máster en Preservación de Fotografía y Manejo de Colecciones de Ryerson University de Canadá (2008). Con más de veinte años de experiencia en el ámbito del patrimonio cultural, ha participado en el desarrollo y ejecución de numerosos proyectos de preservación de fotografía patrimonial. Actualmente es Jefa del Archivo Fotográfico y Audiovisual de la Biblioteca Nacional de Chile.

Ignacio Szmulewicz (panelista): Historiador y crítico de arte, formado en la U. de Chile. Magíster en Arquitectura (PUC). Ha publicado los libros "Arte, ciudad y esfera pública en Chile" (2015) y "Fuera del cubo blanco" (2012). Fue Coordinador del Centro de Documentación de las Artes Visuales del Centro Nacional de Arte Contemporáneo (2017-2020). Actualmente se desempeña como crítico de arte de la revista La Panera. 


Claudia del Fierro (panelista): Artista visual, Licenciada en Artes Plásticas y Magíster en Artes Visuales, Universidad de Chile, y Master of Fine Arts, Critical and Pedagogical Studies, Academia de Arte de Malmö. Del Fierro trabaja en una variedad de medios, incluyendo performance, video, fotografía e instalación.  Ha participado en la Bienal Mercosur, Bienal de La Habana y numerosas exposiciones individuales y colectivas en Europa y Sudamérica.

Información periodística, Violeta Bustos Vaccia, jefa académica de Extensión y Comunicaciones Estética UC, Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo..