El 03 de abril se realizó el inicio simbólico del año académico, en una ceremonia que reunió a profesores, estudiantes y administrativos de la Facultad de Filosofía. La apertura fue encabezada por el Decano de la Facultad, Olof Page, seguido por la Directora(s) del Instituto de Estética, Margarita Alvarado. Además, se contó con la presencia de la Directora de Asuntos Estudiantiles del Instituto de Filosofía, Pamela Chávez; la Directora de Asuntos Académicos del Instituto de Filosofía, Beatriz Contreras, y; el Secretario Académico del Instituto de Estética, José Pablo Concha.
La jornada inició con unas palabras del Decano, quién hizo un llamado a continuar con el diálogo respetuoso e inclusivo, orientado hacia la resolución de conflictos en la comunidad. Por su parte, la Directora (s), Margarita Alvarado, recordó algunas de las instancias positivas de comunicación entre los Institutos de Estética y Filosofía, haciendo hincapié en el objetivo prioritario de continuar fortaleciendo todas las instancias que permitan reunir a alumnos, funcionarios y académicos de ambos Institutos.
A continuación se hizo entrega de los premios de Matrícula de honor a los estudiantes de pregrado de la Facultad, los que fueron premiados por obtener las calificaciones más altas de su generación. Hicieron entrega de los premios las autoridades presentes en la ceremonia.
Los estudiantes que recibieron distinción fueron:
INSTITUTO DE FILOSOFÍA
Primer año: Domingo de la Fuentes
Segundo año: Cristobal Palisson
Tercer año: Francisco Espinoza
Cuarto año: Alicia Sánchez
INSTITUTO DE ESTÉTICA
Segundo año: Paulina Bastián
Tercer año: Ignacio Veraguas
Cuarto año: Mariano Sánchez
Para cerrar la ceremonia, el profesor visitante Ramón Rodriguez de la Universidad Complutense de Madrid, realizó la conferencia titulada: "Tres metáforas metafísicas de la condición humana: el náufrago, el extranjero, el viajero". La conferencia planteaba el pensar los límites de la inteligibilidad, a través de tres metáforas absolutas basadas en experiencias humanas radicales, haciendo énfasis en el náufrago, pero observadas también en figuras como en la del extranjero y del viajero. La metáfora del náufrago fue planteada como portadora de una dimensión positiva y otra negativa. Por un lado, sería fenómeno positivo en tanto el náufrago, en su acción natatoria de supervivencia, posee la capacidad de actuar para lograr sus metas. Su dimensión negativa es constituida por su inadaptación, por su existencia indeterminada. Las metáforas propuestas por el profesor Rodriguez, tenían la intención de tematizar el inicio del año académico, señalando la posibilidad de progresar desde la profundidad, sobre el salir de sí para abrirse al mundo, búsqueda emprendida por la fenomenología durante el siglo XX y por los estudiantes que cada año comienzan un ciclo de aprendizaje con nuevas dificultades.
Créditos texto y fotografías: Javiera Depassier.
Edición texto: Karina Sánchez.